domingo, 19 de julio de 2015

La inconstante permanencia: Mientras ella esté acá, todo está bien.

El viernes 17 a las 10 y media de la noche algunas preguntas se agolparon en mi cabeza, como una bandada de pájaros invisibles. Vi ante mí un cuarto verde y tres puertas que apuntaban a caminos diferentes. No se trataba de un sueño, sino de “Mientras ella esté acá, todo está bien”, una obra dirigida por Marcela Arza, Flora Ferrari y Ernesto Donegana.

La escenógrafa, Merlina Molina Castaño, utilizó el espacio con tres puertas de la sala, y recreó el cuarto de un hospital. Una de las puertas representaba el mundo exterior, aquel que permanece anónimo y repleto de seres sin rostros. Los seres que respiran en medio de la masa. Otra, apuntaba al encuentro que se produce en la profundidad de una charla y en el contacto de los cuerpos, más allá de sexo, y más acá también. La ultima puerta, era el puerto de la quietud, el de los objetos acumulados y muertos.



¿Cuál es el momento exacto en que nos olvidamos del mundo y confiamos en que aquel encuentro es  el único real? ¿Cuál es el instante preciso en que comenzamos a desnudarnos frente a otro? ¿Cómo es que perdemos certeza de que todo aquí dentro sigue su pulso? ¿Cuándo y cómo penetramos en el otro?

Flora Ferrari y Ernesto Donegana decidieron unir los conceptos y sentimientos representados en dos obras, para volverlos uno, para contar una historia propia.
Unieron La mansa de Dostoievski y Ester Primavera de Arlt, utilizando la complejidad y crudeza de los autores. Nos revelaron así,  los intersticios que solemos cruzar para lograr comunión. El rechazo, el miedo, la frustración,  la pasión, el amor y la felicidad. Conocer al otro decanta en miles pasajes, que antes  fueron decisiones, que supieron ser saltos  inconscientes.

La obra de estos dos jóvenes dramaturgos es actuada por ellos mismos y cuenta una historia de amor que trascurre en un hospital para tuberculosos. La misma es atravesada por todos esos estadios-pasajes y algunos de ellos, son llevados al extremo.

Más allá de algunos saltos fuera de la linealidad narrativa de la obra, aquella se nos presenta como verosímil porque todos tuvimos una historia de amor y desencuentro entre cuatro paredes: dentro de nuestros mundos creados  y habitados por dos.

Ambos personajes no se dirimen entre villanos y héroes: cada uno se enfrenta a los monstruos propios y a los ajenos. Por eso la identificación es unívoca.

Sabemos que el personaje femenino viene de una infancia pobre, y que él gusta de acumular objetos. También sabemos que ella sana con su presencia,y que él describe sus sentimientos en un pequeño cuaderno. Desde el principio de la obra, sabemos que él es débil y le duele su soledad. Sobre ella, sabemos que es capaz de cubrirse  con palabras, que tiene discursos guardados en los bolsillos y que aprendió a  esconderse entre el humo de su cigarrillo.
 
El guión y las actuaciones se involucran de manera certera, las personalidades estallan en cada gesto de estos actores. Entonces nos hacen creer que podemos desnudarlos. Nos hacen pensar que podemos adelantarnos al último acto.

El cuarto del personaje masculino  en aquel hospital permanecía con luces oscuras, lúgubre. Se mantenía entre puertas cerradas, para nosotros, que mirábamos desde afuera, y también para ella: el personaje femenino, tan anónimo como él. Los dos seres sin nombres se disputaron el poder de uno sobre el otro. Aquel que gane, será quién desnude, quién haya intervenido en el segundo. Como si se tratara de un juego unilateral. A lo largo de la obra, las puertas comenzaron a abrirse, para ella y para nosotros.

Cuando los pájaros invisibles se disiparon, pensé que el amor sobrevive porque se adapta a formas, se acomoda a tiempos y personas. Que surge en lugares inesperados. En aquella habitación sombría también se sintió su pulso, su andar silencioso de dientes marcados. El  final de la obra es intenso, el libreto se oye profundo y real. Como el amor cuando atraviesa.

Teatro VERA VERA
Vera 108
Reservas: ( últimas funciones!) http://www.alternativateatral.com/obra35999-mientras-ella-este-aca-todo-esta-bien
o al: 4854-3655.

 (Las imágenes fueron extraídas de Alternativa Teatral)

No hay comentarios.:

Publicar un comentario